Tránsitos en astrología: el clima astral

Del mismo modo que el clima nos afecta, ¿o no es cierto que en un día nublado estamos más melancólicos o taciturnos; mientras que en uno soleado nos encontramos más animados? También la posición de los astros alrededor de nosotros produce un efecto (la Luna llena nos vuelve más «lunáticos» o románticos; la noche y el día, y las estaciones -ciclo solar- alteran nuestros ritmos biológicos), de la misma manera, el resto de planetas están produciendo unos efectos sobre nosotros.
Es por esto que hablamos de un «clima astral». Por supuesto esto afecta a todo el mundo, por lo que se puede hacer una astrología mundial, estudiando el ambiente en el que se moverá la política mundial, por ejemplo.
Pero también nos afectará de modo particular a cada persona, en función de nuestra sensibilidad.
Esto último es lo que estudiamos en los tránsitos sobre nuestra Carta natal. Nuestra sensibilidad viene indicada en ella, y según los astros en movimiento afecten sobre alguno de nuestros planetas natales, o en las casas en las que nos caigan, así será nuestro efecto personal.
De esta manera podremos «predecir» cómo nos vamos a sentir. Los programas informáticos nos permiten saber dónde van a estar los planetas el día que queramos (dentro de un mes, de un año, de 10 años, de 50…), o conocer cómo se encontraban en el pasado, cuando nos sucedió aquello que nos marcó tanto.
Por supuesto, lo que vamos a saber es cómo nos vamos a sentir, qué estará sucediendo en nosotros. Adivinar el suceso externo que lo ha provocado (o si incluso éste existe, o simplemente es un cambio interno nuestro) ya es harina de otro costal.
Por ejemplo podemos ver que vamos a tener un cambio radical en nuestra vida, en el ámbito de nuestras rutinas y trabajo, ya que Urano o Plutón entran en nuestra casa 6, y entonces podremos pensar que algo va a suceder en este campo: si estoy trabajando pues puede suceder que me despidan, o que me ofrezcan algo mejor en otro sitio y me vaya yo; o si no estoy trabajando, que por fin encuentre uno. Las opciones posibles son variadas, aunque podremos deducir con el resto de tránsitos que tengamos en el mismo momento, lo que será más plausible. Pero la cuestión es que pasado el tránsito nosotros habremos cambiado totalmente con respecto a nuestra rutina diaria.
En esto se basa la astrología predictiva mediante los tránsitos.
Existen otras técnicas astrológicas que se usan junto con ésta, para confirmar lo previsto. Las más usadas son las Progresiones y la Revolución solar. Las veremos en otro artículo.
Veamos un ejemplo para comprender mejor el clima astral.
Astrología en la época del COVID
Hay que comprender que la astrología es geocéntrica, es decir, que se basa en el giro en torno a nuestro planeta. Los planetas más cercanos a nosotros hacen su recorrido más rápidamente, mientras que los más externos pueden tardar lustros, o decenas de años en recorrer una pequeña porción de nuestro cielo. Y ciertamente son los más lejanos los que suelen causar más efectos, ya que es mantenido en el tiempo más prolongadamente.
Por ejemplo, en 2019 Urano entró en el signo de Tauro (donde permanecerá 7 años), que representa a nuestro planeta Tierra. Esto nos aventuraba terremotos (no solo físicos) y sucesos que alterarían al planeta entero, con el «nervioso, inquieto e imprevisible» Urano dentro de la tranquila materia de Tauro. Este planeta tarda 84 años en dar una vuelta completa al zodíaco, por lo que difícilmente volvamos a verlo entrar en este signo (a no ser que ahora seamos niños).
Pero a esto se añadió que en 2020 se produce la conjunción en Capricornio de Plutón-Saturno-Júpiter, a los que se une en Marzo el planeta Marte. En el signo que representa el tener que enfrentar las dificultades de la vida, la lucha por alcanzar logros y por lo tanto el máximo representante del mantenimiento de nuestras sociedades económicas, se produce una fuerte conjunción de los dos planetas sociales (Saturno y Júpiter), con Plutón marcando una gran intensidad y Marte dando el botón de arranque a lo que se venía ya hacía pocos meses extendiendo y que se traduciría en un frenazo en seco de la economía global.
El efecto ya lo conocemos. Sacudió por completo a todo el mundo, y no solo a nivel económico.
En concreto a cada uno de nosotros estos mismos planetas también nos afectaban en nuestras Cartas astrales personales, por supuesto el efecto social lo vivimos todos. Pero para conocer el efecto concreto que causó en nosotros psicológica o físicamente, tendríamos que mirarlo sobre nuestras Cartas astrales. Si los planetas en tránsito afectaron a planetas personales, o a ángulos importantes nuestros, seguramente los sucesos fueron mucho más intensos, mientras que si no lo hacían, lo podríamos haber vivido más tranquilamente.
Plutón entrando en Acuario.
En 2024 tenemos al planeta más lento, que tarda unos 248 años en dar toda la vuelta al zodíaco, abandonando Capricornio y entrando en el signo de Acuario. Se trata de Plutón (planeta enano según la astronomía moderna, pero planeta al fin y al cabo, que por lo menos le han dejado ese nombre y de lo que me alegro personalmente, ya que a los que estudiamos EGB creo que nos costó asimilar que nos lo eliminaran de la lista de planetas de nuestro sistema solar).
Aquí sí que tenemos claro que en nuestra vida pocos signos veremos recorrer a este lejano planeta, y cada vez que abandona uno y entra en otro, lo que ocurre cada 12-30 años (en función de la constelación), se producirán efectos marcados sobre la sociedad en su globalidad.
¿Qué significa que entre en Acuario? Pues teniendo en cuenta el significado de la energía acuariana, se augurarían cambios sociales muy importantes, y que durante los próximos 20 años ésta se volverá más liberal, luchando más por sus derechos y uniéndose para encontrar solución a los problemas que se han originado por la economía de consumo, las desigualdades sociales y la mala gestión de nuestros dirigentes.
Sólo hay que mirar en la historia pasada, hace 248 años, qué eventos importantes sucedieron durante esos 20 años (de 1776 a 1796), y veremos que comenzando con la Declaración de Independencia de los EEUU, seguimos con la Revolución francesa…, lo cual nos da una idea. El lema «Libertad, Igualdad y Fraternidad» representa increíblemente bien los ideales acuarianos.
Se producirá una «purga» de todo lo que hemos tenido oculto como sociedad, saliendo a la luz las sombras de nuestros sistemas económicos (sea el que sea en nuestro país, no sólo en los de economía de consumo). Será difícil mantener secretos, aunque se intentará, pero será el conjunto de la sociedad la que sea capaz de hacer las necesarias «limpiezas». Esperemos que esta vez pueda conseguirse mediante el diálogo, pero Plutón no acepta medias tintas, o estás conmigo o contra mí.
Los cambios también tendrán lugar en temas tecnológicos, aprenderemos mucho de los peligros de sumergirnos en la era de la inteligencia artificial. Los avances en este campo pueden ser muy intensos, ya lo estamos viendo.
La entrada a finales del 2025-principios de 2026 de Neptuno junto con Saturno en Aries, esperemos que atempere y suavice los ánimos individualistas y egoicos, haciéndonos tener una visión más extensa y realista de las situaciones; y con Urano cambiando a Géminis también entonces, que el diálogo sea la principal herramienta usada.
Y además de todo esto a nivel global, estos planetas también te afectarán a ti, marcando un cambio importante en algún área de tu vida, si vemos dónde se sitúan en concreto sobre tu Carta astral.
¿No sientes curiosidad al respecto?